El pequeño país de Costa Rica es un tesoro natural a gran escala. Y es que a pesar de ser uno de los países más pequeños del mundo, en sus escasos kilómetros cuadrados se halla ni más ni menos que el 6% de la biodiversidad mundial, una cifra que se dice pronto, pero que se traduce en más de 90.000 especies que han hecho de Costa Rica su hogar. Esta maravillosa característica ha convertido a este país en uno de los destinos más atractivos, auténticos y biodiversos del planeta y tú lo vas a conocer.
Bosques frondosos, playas vírgenes, volcanes imponentes, islas perdidas, parques naturales protegidos y mucha hospitalidad de los amables costarricenses es lo que Costa Rica ofrece al visitante amante de los bellos paisajes. En esta apasionante aventura en el corazón de Centroamérica, el viajero además de descubrir una cultura progresista y moderna, disfrutará de su caprichosa naturaleza donde el ser humano se ha adaptado, y lo más importante, ha aprendido a valorarla, convirtiéndola en su atractivo más deseado y demandado.
Costa Rica se encuentra en Centroamérica. Bañado por un lado por el mar Caribe y por el otro por el océano Pacífico y ubicado muy cerca de la línea ecuatorial, hacen que este país posea un clima tropical donde las temperaturas templadas y agradables perduran durante todo el año. Por este motivo, Costa Rica es conocida por poseer la famosa ‘eterna primavera’ un fenómeno meteorológico que pocos países gozan, ofreciendo al visitante un clima suave y regular, perfecto para gozar de experiencias al aire libre.
Pero Costa Rica no es solo naturaleza exuberante y actividades al aire libre. Este país ofrece una cultura arrolladora, tradiciones, historia y ciudades repletas de pura vida. San José es su capital, un pedacito de urbanismo en medio de la selva salvaje donde poder disfrutar de los sencillos placeres que ofrece este país. San José suele ser la puerta de entrada a Costa Rica, una primera parada perfecta para comenzar a adentrarse en la cotidianidad de los ticos. Tal vez la mejor bienvenida que pueda recibir el viajero ya que sentirá su hospitalidad nada más pisar tierra costarricense.
DE PASEO POR LOS VOLCANES
Costa Rica es territorio volcánico y es que este país está situado en el conocido ‘Anillo de Fuego del Pacífico’ una región que atraviesa más de 40.000 kilómetros de costas del océano Pacífico albergando numerosos volcanes. Por este motivo Costa Rica cuenta con más de 200 volcanes, de los cuales al menos la mitad están en activo. Sin embargo, hay uno en concreto que forma parte del día a día de los costarricenses, el imponente volcán Arenal el cual se halla en las llanuras del norte del país, en el parque homónimo. Aquí el viajero puede realizar senderismo, tirarse en tirolina y cruzar numerosos puentes colgantes. Además de este volcán, Costa Rica posee otros donde poder pasear como el Irazú o el Rincón de la Vieja, dos alternativas menos famosas pero igual de interesantes.
CONOCIENDO LOS MEJORES PARQUES NATURALES
Costa Rica es famosa por su biodiversidad y conservacionismo de la naturaleza y todo ser vivo que habita en ella. Por este motivo, más del 25% de su territorio está protegido en forma de parque natural, área protegida, reserva forestal y biológicas y refugio de vida salvaje. Una de estas áreas, es el Parque Nacional Tortuguero, una reserva natural única por ser uno de los criaderos salvajes de tortugas más famosos. Esta área está bañada por el mar Caribe y además de proteger la anidación de la tortuga verde, preserva numerosas especies marinas y terrestres. En este maravilloso parque se pueden realizar recorridos para conocer el bosque tropical y avistar alguna de las especies que habitan la zona como el sapo venenoso, el caimán y cómo no la tortuga verde.
LOS BOSQUES NUBOSOS MÁS FRONDOSOS
Monteverde es una de las experiencias estrella que hay que vivir si se viaja a Costa Rica. Este bosque nuboso es conocido por albergar una gran biodiversidad en su fauna y flora, rica y muy variada. En este bello lugar el visitante además de hacer senderismo para conocer de primera mano el panorama natural podrá lanzarse por las tirolinas, pasear a caballo y lo mejor de todo poder avistar a algún puma, el quetzal, diferentes especies de monos y jaguares.
DE PLAYA EN PLAYA
Además de parques naturales y bosques repletos de aves, flores de mil colores y vegetación de diferentes tonalidades verdes, Costa Rica posee playas muy características de estas tierras. Algunas de las más famosas son la playa Santa Teresa, concurrida por los habitantes de la zona para practicar surf y realizar deportes acuáticos donde el viento sea el principal motor. Otro de sus famosos arenales es la conocida como Manuel Antonio, ubicada en el parque protegido homónimo y tal vez una de las más bellas del país. Esta playa se caracteriza por su tranquilidad, por estar rodeada de selva y por sus aguas turquesas y profundas, un paraíso terrenal.